En la vida, a veces nos encontramos en situaciones incómodas, especialmente cuando se trata de dinero y amigos. Es completamente normal sentirse preocupado por cómo abordar el tema de una deuda pendiente.
Primero, es importante recordar que en la amistad, si por ejemplo a un amigo no le llega el dinero para poder comprar algo, siempre ofrecerse como voluntario para darle el dinero que le falta puede ser una muestra de ayuda. Y yo creo que está bien dárselo porque haría lo mismo por ti.
Sin embargo, si necesitas esos 30 euros que le prestaste, no dudes en pedírselos de vuelta. La comunicación es esencial en una relación de amistad y tú amigo entenderá tu situación.
No hace falta que le digas todos los días que le devuelvas el dinero que en su día le diste tu, pero si estaría bien que le vayas recordando que aún te sigue debiendo ese dinero, para así tu amigo no olvidarse de dártelo.
Es normal sentir incomodidad al hablar de dinero con amigos. Ayudar a un amigo que lo necesita puede hacer que la amistad vaya a mejor y con más confianza, pero también es importante pensar que en algún momento ese dinero que le dimos también nos hace falta a nosotros. Si necesitas que te devuelva el dinero que le prestaste, no dudes en decírselo con amabilidad. Recordarle de vez en cuando que aún te debe esa cantidad puede ser útil para que no lo olvide.
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